¿Quisieras despertarte a una vida distinta? ¿Una vida en que estuvieras libre de dolor? ¿O todos tus hijos anduvieran en la verdad? ¿Un día en que tu jefe no te gritara? ¿O te adelantaras en todos tus proyectos? ¿Qué tal el trabajo, la casa, la familia, y las vacaciones de tus sueños?
Salmo 37:4 dice, “Deléitate en el Señor y él te concederá los deseos de tu corazón.”
¿En qué te deleitas?
En vez de despertarte a una nueva vida este miércoles, te invito a despertarte a una nueva perspectiva. Entre más me deleito en el Señor, más confío en él para transformar los deseos de mi corazón a que se alineen con los deseos de su corazón.
Señor, confío en ti. Muchas veces quisiera cambiar las circunstancias de mi vida o quisiera que mi vida se viera más como en los sueños que soñé. Pero el mayor deseo de mi corazón es ser un deleite a ti como tu hija - a deleitarme en lo que te trae deleite y ser transformada en los deseos de mi corazón. Gracias por tu paciencia conmigo en ese proceso de transformación. En el nombre de Jesús, Amen.