Los jóvenes no son los únicos que se enferman del amor. En la película de Disney, Bambi, un animal enamorado es “twiterpado.” El Amigo Búho advierta a Bambi y sus amigos de esta condición al llegar a la primavera. Es el sentimiento cuando el mundo para y lo único que puedes ver es la cara de la persona que amas.
Ese tipo de amor no es exclusivo a los animales ni a los jóvenes. Mi abuelo llegó a ser viudo a los 79 años. Unos años después, se volvió a casar con una mujer maravillosa que le acompañó hasta el día en que se murió en diciembre del 2014.
Cuando primero conocimos a Mary, me sorprendió ver a mi abuelo, un viejito, portarse como un joven enamorado. ¡Estaba twiterpado!
El amor nos transforma—el dar y el recibir el amor. Cuando comprendemos la profundidad y el alcance del amor de Dios para con nosotros—cuánto nos ama—nos cambia para siempre.
Dios es amor (1 Juan 4:8). Y el amor perfecto echa fuera el temor (1 Juan 4:18). El amor sin fin sacrificó a su hijo para que pudiéramos vivir (Juan 3:16).
Te invito a ser transformada por el amor hoy. Que te portes como una twiterpada y ser considerada como una loca por otros, abrumada por la magnitud del amor de Dios y tu amor por él.
Que nunca abandonemos nuestro primer amor al Padre (Apoc. 2:4).