Escrito por Corina Díaz, voluntaria del Ministerio Hermana Rosa de Hierro en Argentina
Es el último mes del año y como de costumbre doy un vistazo a lo que representó mi recorrido por este 2021, ¡Cuántas cosas pasaron! Me voy dando cuenta de que cada situación superada simplemente era una acción por resolver y no un gran problema como yo pensaba. Es cierto lo que dice Pablo, las dificultades no durarán mucho y son pequeñas, y puedo ver cómo cada situación me hizo crecer y culminar este año con otra perspectiva; así que pienso en este pasaje de Pablo:
2 Corintios 4:16-18 Es por esto que nunca nos damos por vencidos. Aunque nuestro cuerpo está muriendo, nuestro espíritu va renovándose cada día. Pues nuestras dificultades actuales son pequeñas y no durarán mucho tiempo. Sin embargo, ¡nos producen una gloria que durará para siempre y que es de mucho más peso que las dificultades! Así que no miramos las dificultades que ahora vemos; en cambio, fijamos nuestra vista en cosas que no pueden verse. Pues las cosas que ahora podemos ver pronto se habrán ido, pero las cosas que no podemos ver permanecerán para siempre.
Totalmente ciertas estas palabras, lo que vemos hoy se va día tras día, y lo que NO vemos es inmutable, por eso, recordar el dolor es una manera de entender que es perecedero y que hoy es una nueva oportunidad para agradecer por esto.
Te quiero compartir cuatro formas en las que puedo sacarle provecho a mi dolor, ¡especialmente en este 2021!
1. Uso mi dolor para glorificar a Dios y acercarme a Él. Cuando estamos en dolor nos conducimos en la búsqueda más profunda de Dios, es una nueva oportunidad para confiar más en Su poder.
2. Mi dolor me permite ser más como Cristo. Somos más sensibles y reverentes cuando estamos pasando dolor, nos acercamos a la semejanza de Cristo con corazón puro.
3. El dolor me acerca a otros. Así es, el dolor me acerca a mi comunidad para solucionar mis problemas.
4. Es una oportunidad para testificar acerca de Cristo. Piensa por un momento, ¿qué es lo que más te impacta de alguna persona cuando le conoces? ¡Muchas veces es el dolor de la persona y ver cómo lo ha superado! Entonces, ¿cuántas personas podrían llegar a Cristo con tu testimonio?
Aprovecha lo que queda de este 2021 para redefinir tu visión acerca del dolor, recuerda que el dolor es una señal de alerta que indica que algo no anda bien, y Dios usa el dolor para protegernos, cuidarnos, guiarnos y hacernos crecer.