Cuando preguntaron al Maestro Sabio sobre el mayor mandamiento, les contestó que debemos amar a Dios sobre todas las cosas y amar al prójimo como a ti mismo.
Pablo, al final de su advertencia y su descripción del amor en 1 Corintios 13 concluye que lo que permanece es la fe, la esperanza, y el amor, pero que el mayor de todos es el amor (1 Cor. 13:13).
La niña de cuatro años estaba aprendiendo a reconocer unas palabras por sus letras. Una de las primeras palabras que aprendió fue “amor,” así que cuando hojeó las páginas de la Biblia, declaró a sus padres que toda la Biblia está llena de amor.
Jesús, Pablo, y la niña están de acuerdo. Todo se trata de amor.
Lo mejor y lo más sabio: el AMOR.