Un análisis de las definiciones de la palabra victoria revelan verbos como: derrotar, superar, y triunfar. No les voy a aburrir con una lección gramática, pero estos verbos son transitivos, es decir que son verbos de acción que requieren un objeto directo o algo que recibe la acción.
No se puede decir “Derroté” sin mencionar qué o a quién derrotaste.
“Superé…” ¿Pero qué superaste?
“¡Triunfamos!” ¿Y sobre qué triunfaron?
Todos anhelamos ser victoriosos, pero la realidad desafortunada es que no se prueba la victoria sin antes haber pasado por la batalla. El triunfo no se gana hasta que haya amenazado la derrota. Se realiza la victoria a través de la lucha de superar los pensamientos que nos atacan.
¿Se puede tener victoria sin una batalla? No.
Pero podemos ser gozosos y victoriosos en la batalla.
Y es ese aspecto de la victoria que vamos a explorar este semana en preparación para el retiro de damas en que voy a enseñar este fin de semana.