Escrito por Katie Forbess, voluntaria y presidenta de la junta del MHRH
El tema del Ministerio Hermana Rosa de Hierro para este año es “Comprometido a Cristo 24x7 en 2024”.
¿Alguna vez te has encontrado en un momento en el que pensaste que podrías perderlo todo? Quiero decir, literalmente, podían quitártelo todo. La vida que estabas viviendo y todas las razones por las que mantenías la cabeza en alto podían desaparecer. Si perdieras literalmente todo lo que tienes, ¿qué te quedaría?
No puedo decir que me haya pasado a mí, pero sí me enfrenté a un momento en el que consideré seriamente que podría ocurrir. ¿Qué me quedó? Cristo. Me quedé con Cristo. Cristo para mostrarme cómo actuar y qué hacer. Cristo para definir quién soy. Cristo para darme una razón para seguir adelante y continuar caminando. Cristo para permitirme decir: “Todo va a estar bien. No sé exactamente cuándo ni cómo, pero todo estará bien”.
“Sin embargo, todo aquello que para mí era ganancia, ahora lo considero pérdida por causa de Cristo” (Fil. 3:7).
¿Qué gané? Todas esas cosas que tenía miedo de perder se convirtieron en nada comparadas con mi deseo de conocer mejor a Cristo, seguirlo más, leer más mi Biblia, hablar más con los demás sobre Él. Esa experiencia me hizo repensar la forma en que vivo el día a día y la forma en que me comprometo con Cristo.
El tema de este año es muy personal para mí mientras me esfuerzo por seguir contando todo como pérdida en comparación con lo que encuentro y espero encontrar en Cristo. Ahora vivo comprometida con Cristo 24 horas al día, 7 días a la semana, pero ¿significa eso que no tengo más que aprender? No.
¿Cómo influye ese compromiso en todos los demás compromisos de mi vida? Puedo decir que lo que estudiaremos este año como tema fue fundamental para saber cómo salí de esa situación y cómo fortaleció mi determinación de acercarme a Él.
Cada mes nos centraremos en un nuevo tema que nos ayudará a considerar cómo podemos estar más comprometidos con Cristo, incluido "Comprometidos en oración", "Comprometidos unos con otros en Cristo" y "Comprometidos a confiar y obedecer”.
Tómate un minuto para considerar todo lo que tienes como una pérdida en comparación con Cristo. Cada título que has conseguido, cada relación de la que formas parte, todo el dinero que has ganado... todo ha desaparecido. ¿Qué te queda? Oro para que la respuesta sea Cristo.