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En las Escrituras, vemos “gracias,” como palabra y como concepto, ser expresado de varias formas. En el Antiguo Testamento, se traduce mayormente como “alabanza.” En el Nuevo y el Antiguo Testamentos, vemos las palabras:
Gracias.
Gratitud.
Alabanza.
Adoración.
Agradecido.
Aprecio.
Y vemos esas palabras en el contexto de un:
Salmo.
Sacrificio.
Oración.
Canción.
En su libro, Los cinco lenguajes de amor, Gary Chapman explica que hay más de una sola manera de expresar y recibir el amor. De igual manera, la acción de gracias puede ser compartida de varias formas:
Una expresión verbal de gratitud.
Una actitud de aprecio.
Un regalo sacrificial.
Tiempo pasado juntos.
Un acto de servicio con una sonrisa.
Un abrazo o un apretón de manos.
Hoy, te animo a ofrecer a Dios una alabanza, un cántico en aprecio de quién es. Y escoge una manera creativa para agradecer a alguien, quizás una persona con la que no has expresado tus gracias recientemente.