Ministerio Hermana Rosa de Hierro

“Debemos reunirnos para tomar un café.” He perdido la cuenta de las veces que he dicho esa frase a alguien. Y he aprendido que si no pongo algo en el calendario en el momento, aun si las dos tenemos las mejores intenciones, el tiempo compartido con un café nunca se va a realizar.
Pasa lo mismo cuando hay cosas importantes, pero pierden su urgencia en medio de los otros compromisos y responsabilidades. Un ejemplo clásico de eso es cuando quiero reunirme con otras mujeres en un grupo pequeño. Tenemos que ponerlo como prioridad.
No hay una hora mágica que funciona para todas. Sin embargo, recomiendo que aparten un tiempo programado, específicamente designado para un tiempo en estudio bíblico con el grupo pequeño.
Unos horarios en las que muchas mujeres se reúnen como grupo pequeño son:
• Los martes por la mañana
• Los lunes en camino a casa, después del trabajo
• Los miércoles en la noche en el local de la iglesia
• Los martes o jueves por la noche
• El domingo en la clase dominical
• Los sábados por la tarde
• Dos veces al mes
Ya captas la idea... No hay un horario específico ni mágico.
Mi otra recomendación cuando se reúnen es que aparten una hora y media para la reunión. Somos mujeres y nos gusta hablar, pero esa hora extendida permite que haya tiempo para oración y profundidad de conversación. Es fácil pasar todo el tiempo compartiendo las peticiones en oración y poniéndonos al tanto de nuestras vidas. Ninguna de las dos cosas es mala, pero no podemos olvidarnos de la carne, el estudio bíblico para fortalecernos y animarnos como hijas de Dios.
Entonces, ¿CUÁNDO? Cuando sea, pero escoge un tiempo y realiza la reunión.