Nos encanta construir relaciones. Suscríbete a nuestro blog para recibir ánimo semanal en tu bandeja de entrada de correo electrónico.

Recibir el blog

Etiquetas

Búsqueda

Compras en línea

Nuestros libros, recursos gratis, tarjetas, botellas de agua, y más

Compra Ahora

2020 02 05 Karla LeytonEscrito por Karla Leyton, voluntaria del Ministerio Hermana Rosa de Hierro en Nicaragua

Nuestras vidas están llenas de momentos buenos, pero también de situaciones de angustias. En ocasiones nos sentimos agobiadas y nos cuesta tomar decisiones. Así mismo, no sabemos a quién acudir para que nos escuche y pensamos en amistades o familiares; no es que este mal, pero es a Dios al primero que debemos acudir cuando no podemos más, cuando la incertidumbre y el temor se apoderan de nosotras porque es en esos momentos cuando nuestra fe está a prueba, como lo hemos escuchado con el proceso que tiene el oro para ser refinado.

La conexión con Dios por medio de la oración es sublime. Tenemos la oportunidad de que, mediante Su Hijo Jesús y nuestro Salvador, nuestras peticiones sean escuchadas y respondidas en el momento que él ve conveniente. Siempre decimos “que se haga Tu voluntad, oh Dios,” pero nos cuesta ser pacientes y esperar esa voluntad, incluso aceptarla.

La oración forma parte de la armadura de Dios con la cual debe vestirse toda cristiana. Nuestra fe y vida espiritual se fortalece, nos forja el carácter de manera positiva y no sólo en momentos de dificultad debe estar presente, sino que también a través de ella debemos dar gracias a nuestro Padre por lo que nos permite vivir, por todas las personas maravillosas que forman parte de nuestra familia espiritual y las bendiciones que él nos ha dado cada día, recordando lo que la Palabra de Dios nos enseña sobre, “perseverad en la oración, velando en ella con acción de gracia.” (Col. 4:2 RV95)

En mi vida he visto tantas veces el favor de Dios ante mis peticiones. Me ha tocado esperar, pero sé que el tiempo perfecto de Dios llega en hora buena; sobre todo cuando entrego mis angustias y ansiedades a él. Surge una paz inexplicable que siento en mi corazón. Asimismo, la oración fortalece mi espíritu cuando está contristado. En mi trabajo secular me ha tocado lidiar con emociones fuertes y muchas veces debo inyectar ánimo en otros. Siempre oro a Dios porque sé que él me dará las palabras adecuadas para consolar, ya que él me consuela.

¿Sientes angustia o preocupación en estos momentos en tu vida? ¿Deseas que tu fe aumente? ¿Te gustaría practicar el agradecimiento? Entonces, debes recordar lo siguiente... “Y todo lo que pidáis en oración, creyendo, lo recibiréis.” (Mt. 21:22 RV95).

Como hijas de Dios adoptadas por el sacrificio que Jesús hizo, debemos ser fieles a la oración no desmayando ante la dificultad, no quedarnos dormidas en el proceso. Durante la situación que estás viviendo, puedes orar por cada hermana y su familia. Hay mucho que pedir y mucho para mostrar gratitud. Ora con las mujeres que conforma tu familia, porque donde están dos o tres reunidas…

Donar

Necesitamos tu ayuda para poder seguir equipando a más mujeres a lo largo de las Américas.

Donar

 

Noticias por email

Suscríbete al Blog - Ministerio Hermana Rosa de Hierro por correo electrónico

Si te gustaría suscribirte a nuestras noticias mensuales por Email, llena el formulario en la página de noticias.

Contáctanos

+1 501-593-4849 (Teléfono de oficina y mensajes de WhatsApp.)

O envíanos un email

La base de operaciones: Searcy, Arkansas, USA

Fotos

Veas más fotos en nuestra página de Galería de fotos.