Cuando estuve considerando qué carro comprar, opté por un Corolla de la Toyota®. Al considerar mi decisión, noté todos los otros Corollas en la calle. Fue como si nunca hubiera visto un Corolla anteriormente y ahora estaban en todas partes.
De igual manera, mi atención a las referencias de la mano derecha de Dios comenzó al meditar en Isaías 41, en un retiro de damas de la Iglesia de Cristo del Sur de Baton Rouge, en septiembre del 2012. Luego incluí mis reflexiones en un artículo para la revista Wineskins (mayo 2013) y en el cuarto capítulo del primer estudio bíblico interactivo del Ministerio Hermana Rosa de Hierro, Humano Y Santo. Compartiré algunas de esas mismas reflexiones en el Capítulo 2: Una promesa de protección y salvación.
Sin embargo, después de ese fin de semana, como en el caso de mi Corolla, empecé a notar la frecuencia de las referencias a la mano derecha de Dios: sesenta y cuatro veces, según la Nueva Versión Internacional. Cada vez que la Biblia menciona la diestra de Dios, me llamó la atención. Fue como si la mano derecha de Dios me estuviera guiando a esos versículos y, finalmente, a compartir el ánimo que recibí de esos versículos contigo.
Cuando enfrento desafíos, me lleno de temor, o estoy en tierra desconocida, me renueva y me fortalece acordar que estoy segura en la diestra de Dios.
Acompáñame a tomar la mano derecha de Dios. Nos va a iluminar el camino y abrir el entendimiento del honor, bendición, poder, autoridad, protección, salvación, fortaleza, y justicia que se encuentran en su mano derecha.
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